Perros detectan Covid-19 en los primeros días de contagio

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Perros detectan Covid-19 en los primeros días de contagio

Por Maricela Palacio

La detección olfativa con perros tiene una efectividad del 70% al 98%, considerando los primeros 3 a 5 días después de la exposición al virus, siendo el método más rápido de detección actual.

Los perros son el mejor amigo de las personas, pero también tienen un impacto en la sociedad importante: hay estudios que muestran que ayudan a bajar los niveles de estrés, ayudan a la socialización e incluso apoyan a mantener activos a sus dueños. Por si esto fuera poco, ahora los perros también pueden ser un apoyo en impedir la propagación de COVID-19 a través de la biodetección, pues aunque existen pruebas para ello, suelen ser costosas e invasivas para las personas.

Juntos es Mejor con OBI-K19 es un proyecto impulsado por PURINA®, cuyo objetivo es la detección de COVID-19 a través de caninos con un protocolo sencillo y no invasivo, en el que basta con que lo perros olfateen a las personas para saber si portan o no el virus. Al enfermar, el cuerpo despide un aroma particular que puede ser detectado por un perro entrenado en biodetección, lo que le permite distinguir entre una persona sana o enferma.

De hecho, Nestlé® PURINA® está realizando el regreso a oficinas con apoyo de caninos OBI-K19, mostrando los beneficios que tienen las mascotas en la vida de las personas, el aporte que tienen en la sociedad y cómo ayudan en los nuevos procesos de reincorporación a los espacios de trabajo.

“La detección de COVID-19 en lugares concurridos puede prevenir la propagación del virus, sobre todo ahora que la mayoría de las personas están regresando a sus actividades de forma física o híbrida; una vez más las mascotas nos demuestran el impacto que tienen en nuestra vida diaria”, explicó Francisco Mualim, BEO de Negocio, Country Manager de Nestlé® Purina® PetCare México y Líder del Comité de Diversidad e Inclusión de Nestlé® México.

Así inició el proyecto en México

OBI-K19 es una empresa que se enfoca en prestar servicios caninos de diferentes índoles; sin embargo, con la llegada de la pandemia sus creadores desarrollaron un método con el cual los canes podrían ayudar, por lo que se enfocaron en la biodetección de COVID-19. Los procesos iniciaron durante julio del 2020, y un año más tarde, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del IPN (Cinvestav) se unieron para apoyar esta investigación que crecido hasta el día de hoy y ya muestra avances importantes.

Por su parte, este año PURINA® conformó su alianza y apoyo económico para los avances científicos de la primera etapa y donación de alimento Pro Plan ® para los perros.

Esta alternativa es más accesible, tomando en cuenta el precio de otros tipos de pruebas e incluso el tiempo necesario para que el virus sea detectado después de la exposición a él, que de forma general mantienen un periodo largo de espera entre la aparición de síntomas, mientras el virus podría estar propagándose, sin mencionar los casos asintomáticos.

La detección olfativa con OBI-K19 tiene una efectividad del 70% al 98%, considerando los primeros 3 a 5 días después de la exposición, siendo el método más rápido de detección actual. Los caninos pueden detectar COVID a 30 o 60 centímetros de distancia; incluso es posible a distancias mayores, dependiendo de la concentración del aroma.

Los perros entrenados detectan variantes Alfa, Beta y Gamma, y Delta, se mantienen los esfuerzos para detectar otras enfermedades respiratorias.