Por Maricela Palacio
En México y el mundo la cirugía oncológica aún es considerada como uno de los mejores métodos para el tratamiento de diferentes tipos de cáncer, esto sin mencionar que durante los últimos años su evolución ha sido contundente en conjunto con otras terapias para mejorar el panorama de los pacientes.
De acuerdo con el doctor Manuel Acuña Tovar, cirujano oncólogo miembro de la Society of Surgical Oncology y American Thyroid Association, el cáncer de tiroides es el tercero en general de mayor incidencia en México, y uno de los que tiene mejor pronóstico de erradicación, pues es la cirugía la piedra angular de su tratamiento.
Actualmente en México existen opciones quirúrgicas que pueden tener hasta un 98% de curación, dependiendo del tipo de cáncer y la etapa en la que se diagnostiquen. Entre los procedimientos de última generación están lo de mínima invasión que además de ser efectivos, son estéticos y prácticamente invisibles, entre sus beneficios pueden prevenir efectos secundarios como la pérdida de la voz.
En el Día Mundial contra el Cáncer que se conmemora el 4 de febrero, es importante resaltar lo indispensable de la detección oportuna, ya que las primeras etapas de este tipo de cáncer no presentan síntomas, es decir, que los médicos de primer contacto deben buscar indicios de cáncer de cabeza y cuello, incluyendo de tiroides, de manera proactiva durante la exploración médica o bien mediante endoscopía
“Cuando encontramos un cáncer avanzado, los síntomas pueden incluir además de la aparición de pequeños crecimientos (nódulos) en el cuello, dificultad para hablar, inflamación de los ganglios linfáticos, problemas al tragar o respirar y dolor de garganta o malestar en el cuello”, explicó el cirujano oncólogo especialista en técnicas de mínima invasión.
De acuerdo con el especialista, también miembro de la Sociedad Mexicana de Oncología (SMeO), la cirugía de mínima invasión tiene una menor complejidad técnicamente hablando, sin embargo, es de mayor duración puesto a que se realiza de manera sublingual y solamente en manos de cirujanos con especial entrenamiento en Europa, es decir con aval de la International Federation of Head & Neck Oncology Surgery.
El doctor Acuña detalló que “cuando un paciente presenta dificultad para hablar, inflamación de los ganglios linfáticos, algunos problemas al tragar o respirar, así como dolor de garganta o malestar en el cuello, y por su puesto bolitas o nódulos, debe acudir de inmediato con un especialista pues puede tratarse de algún tipo de cáncer de cabeza y cuello”.
La American Cancer Society destaca que ser mujer es un factor de riesgo pues el 80% de los nuevos casos de cáncer de tiroides ocurre entre los 40 y 59 años, sin embargo, existe otro pico de incidencia en hombres entre los 60 y 79 años, por lo cual la distribución hombre-mujer se vuelve homogénea.
Actualmente la cirugía oncológica de mínima invasión para cáncer de tiroides está limitada a centros de alta especialización en cirugía endocrina y endoscópica, ya que necesita un monitoreo transoperatorio muy puntual.
Para la mayoría de los pacientes con cáncer de tiroides, el pronóstico suele ser muy positivo, sin embargo, como cualquier cáncer, la tasa de recurrencia puede llegar hasta un 30 por ciento y puede ocurrir incluso después de décadas del tratamiento, por eso es relevante que los pacientes se sometan a exámenes periódicos y evaluaciones por el resto de su vida, explicó el especialista.
Aunque la información está al alcance de un clic, debemos contemplar que sólo los especialistas pueden dar un diagnóstico, tratamiento y seguimiento adecuado para cada caso, es por eso que pueden contactar al especialista en cirugía de mínima invasión doctor Manuel Acuña Tovar en sus redes sociales como @oncologicamx y vía mail en manoloat@hotmail.com